La zona de los ojos es la más fina de nuestro rostro, lo que la convierte en la más delicada y propensa a sufrir daños. A medida que envejecemos, los ojos suelen ser la primera zona en mostrar signos de envejecimiento. La flacidez de la piel alrededor de los ojos es un indicio temprano de la aparición de patas de gallo.
¿Qué son las patas de gallo?
Las patas de gallo son las arrugas que aparecen entre las comisuras de los ojos y las sienes y son uno de los signos visibles del envejecimiento que se manifiestan en el rostro. Las causas de las patas de gallo son la disminución de la funcionalidad del sistema endocrino, la disminución de la producción de proteínas, la disminución de la actividad de las fibras de elastina, la pérdida de colágeno y elasticidad y la formación de líneas en las comisuras de los ojos.
Causas
Síntomas
La piel del contorno de los ojos es la más delicada del rostro. A medida que envejecemos, nuestra piel pierde colágeno constantemente, lo que afectará en primer lugar a la piel del contorno de los ojos y provocará el desarrollo de las llamadas patas de gallo. La contracción crónica de los músculos orbiculares de los párpados formará patas de gallo dinámicas en orientación radial.
Grupos afectados
A medida que envejecemos, nuestra piel comienza a mostrar signos de la edad y a formarse patas de gallo. Tanto en hombres como en mujeres, la falta de una rutina de cuidado de la piel adecuada dará lugar a la formación de arrugas o patas de gallo.
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